sábado, 25 de julio de 2015

Al “niño” de Pepe Luis

           Llamó al toro desde lejos.
Silencio. Los corazones
sonaban como aldabones
inútiles, y los viejos
que contaban sus historias
olvidaron sus memorias
para entrar en el presente:
Renaciendo una esperanza,
un niño en la Maestranza
está citando de frente.


                                                                  Fernando Pérez Camacho

miércoles, 15 de julio de 2015

Toro (fragmento)

           Ya el toro, entre cristales de colores,
vitrina de su cándido albedrío,
bebe campos en flor, sin flor ni río,
donde esponjar sus jóvenes ardores.

Rompe un cielo cerrado de mantones,
que peina su hondo rumbo de marisma;
alza un errante sueño de pitones
y en un oscuro diapasón se abisma,

-media luna de rebeldía, de muerte-,
aunque un clavel de oro lo abanique
y la tarde redonda, en gloria y suerte
clavada, su optimismo le predique.

Por túneles de azul -¡oh tren en vilo!-
estaciones geométricas apura
sin cesar -fina aguja, negro hilo-,
con nuevo ardor en cada singladura.

Más que su propio impulso o el deseo
de quien tirando va de su camino,
alas celestres danle fuerza y tino…
¡Oh tren que corre en agrio forcejeo!

[…]

Praderas ante él, praderas frías,
esculpidas en burla de dominio.
Ya para, duda. Ya sus correrías
las rige un débil aire de aluminio.


                                                                  Pedro Pérez Clotet

domingo, 5 de julio de 2015

Julito Aparicio

           Como Julio Aparicio torea
nadie lo sabe.
Hay un aroma gitano
que envuelve toda la tarde.
Como Julio Aparicio torea
nadie lo sabe.
Lo que no cabe en el mundo
en un solo lance cabe.
¿Cómo explicar lo imposible?
¿Cómo explicar lo inefable?
Como Julio Aparicio torea
nadie lo sabe.
Hay una nota que tiembla
para el invisible baile
y un fragor de rabia antigua
que pertenece a la sangre.
Como Julio Aparicio torea
nadie lo sabe.


                                                                  Antonio Parra